Teniendo un soporte firme apoyado en una observación cuidada y intensiva, los promotores de IBE identificaron diversas carencias, pero al mismo tiempo oportunidades para innovar, no solamente a un nivel nacional sino también a un nivel mundial. Este hecho se logró en el transcurso del ejercicio de su actividad de consultoría y apoyo a las PYMES (pequeñas y medias empresas) portuguesas, a través de la realización de proyectos de modernización e innovación. Y fué esta visión la que motivó la creación de IBE en Mayo de 1991 y, continúa subyacente a su actividad y estrategia en nuestros días.